¡Hola a todos! Empezamos con el ID.THREE, el primer coche eléctrico de serie de Volkswagen. Vamos a sumergirnos en los detalles, ¡preparados?
Primero, echemos un vistazo a la carrocería. Su diseño es realmente innovador, con líneas limpias y aerodinámicas que contribuyen a su eficiencia energética. Observa la fluidez de las curvas, la forma del capó, la inclinación del parabrisas… todo está pensado para minimizar la resistencia al aire. Es un diseño moderno, elegante, y a la vez, funcional. No se trata solo de estética, sino de optimizar el rendimiento del vehículo. Fíjate en los detalles, en la calidad de los materiales, en el acabado… Volkswagen ha puesto mucho énfasis en la calidad de construcción, y se nota. Es un coche que transmite una sensación de solidez y durabilidad. Hablando de eso, pasemos a la construcción.
La construcción del ID.THREE es una maravilla de ingeniería. Volkswagen ha utilizado materiales ligeros pero resistentes para optimizar el peso del vehículo y, por lo tanto, maximizar su autonomía. La plataforma MEB, específicamente diseñada para vehículos eléctricos, juega un papel crucial en esto. Esta plataforma permite una distribución óptima del peso y una mayor rigidez estructural, lo que se traduce en una conducción más segura y confortable. Se ha prestado especial atención a la insonorización, creando un habitáculo silencioso y relajante, muy alejado del ruido que uno podría esperar de un coche convencional. La calidad de los ensamblajes es impecable, un detalle que se aprecia al tocar los materiales y sentir la precisión de cada pieza.
Ahora, entremos al interior. El habitáculo del ID.THREE es espacioso y luminoso, con un diseño minimalista y moderno. La pantalla central táctil domina el salpicadero, ofreciendo un sistema de infoentretenimiento intuitivo y fácil de usar. Los materiales son de alta calidad, con un tacto agradable y una apariencia sofisticada. El espacio para las piernas tanto en las plazas delanteras como traseras es generoso, incluso para pasajeros de gran altura. El maletero ofrece un volumen considerable, ideal para viajes familiares o para transportar objetos voluminosos. La ergonomía está muy cuidada, con todos los mandos al alcance de la mano y una posición de conducción cómoda y natural. Es un espacio que invita a la relajación y al disfrute del viaje.
El ID.THREE está disponible en TRES variantes básicas, cada una con diferentes niveles de equipamiento y autonomía. Estas diferencias se basan principalmente en la capacidad de la batería. La versión de entrada ofrece una autonomía suficiente para el uso diario en ciudad, mientras que las versiones superiores ofrecen una autonomía significativamente mayor, ideal para viajes largos. La diferencia en la autonomía se debe a la capacidad de la batería, que es el corazón del vehículo.
Hablando de baterías, la tecnología empleada en el ID.THREE es de vanguardia. Volkswagen ha optado por baterías de iones de litio de alta densidad energética, lo que permite una mayor autonomía con un tamaño y peso optimizados. Estas baterías son seguras y fiables, con sistemas de gestión térmica avanzados que garantizan su correcto funcionamiento en una amplia gama de temperaturas. La carga se puede realizar mediante diferentes métodos, incluyendo carga rápida en estaciones de carga públicas, lo que permite recuperar una gran parte de la autonomía en un tiempo relativamente corto. La eficiencia de la batería es clave para la autonomía del vehículo, y Volkswagen ha trabajado duro para optimizar este aspecto.
Por último, pero no menos importante, la seguridad eléctrica. La seguridad es una prioridad máxima en el ID.THREE. El vehículo cuenta con múltiples sistemas de seguridad activa y pasiva, incluyendo airbags, sistemas de asistencia a la conducción y una robusta estructura de carrocería. Además, se han tomado medidas específicas para garantizar la seguridad eléctrica, protegiendo a los ocupantes de posibles riesgos relacionados con la alta tensión del sistema eléctrico. Volkswagen ha realizado exhaustivas pruebas para asegurar que el ID.THREE cumple con los más altos estándares de seguridad, tanto en lo que respecta a la seguridad vial como a la seguridad eléctrica. Es un coche diseñado para proteger a sus ocupantes en cualquier situación.
¿Cuánto durará la batería? Bueno, esa es la pregunta del millón, ¿verdad? La autonomía del ID.THREE depende mucho de varios factores: el estilo de conducción, la temperatura exterior, el uso del climatizador… Volkswagen promete una autonomía que varía según la versión, pero podemos hablar de cifras que oscilan entre TRESCIENTOS y CUATROCIENTOS cincuenta kilómetros en ciclo WLTP. Eso en condiciones ideales, claro. En la práctica, y dependiendo de cómo conduzcas, puedes esperar algo menos, quizás entre DOSCIENTOS cincuenta y TRESCIENTOS ochenta kilómetros. Es importante tener en cuenta que estas son estimaciones, y tu experiencia personal puede variar. Pero en general, para el uso diario en ciudad y trayectos cortos, la autonomía es más que suficiente para la mayoría de los usuarios. Para viajes largos, sin embargo, es fundamental planificar las paradas de carga.
Hablando de carga… El ID.THREE ofrece varias opciones. Puedes cargarlo en casa, con un Wallbox, que te permitirá una carga completa en unas siete u ocho horas, dependiendo de la potencia del Wallbox. Si utilizas una toma doméstica normal, el tiempo de carga se alarga considerablemente, pudiendo llegar a las doce o incluso más horas. Pero la opción más rápida es la carga rápida en estaciones de carga públicas. Aquí, puedes recuperar una carga significativa en apenas media hora, suficiente para continuar tu viaje. La potencia de carga rápida del ID.THREE es bastante buena, lo que te permite aprovechar al máximo las estaciones de carga rápida de alta potencia que cada vez son más comunes. Recuerda que la temperatura de la batería influye en la velocidad de carga, por lo que en climas muy fríos o muy cálidos, la carga puede ser ligeramente más lenta.
¿Y cómo se conduce? Pues la experiencia de conducción es bastante sorprendente. El ID.THREE es un coche eléctrico, así que la aceleración es instantánea y suave. No esperes el rugido de un motor de combustión, claro, pero la respuesta es inmediata y te da una sensación de agilidad que es muy agradable. La dirección es precisa y la suspensión, aunque firme, ofrece un buen confort de marcha. Es un coche que se siente ágil en ciudad y cómodo en carretera, aunque en curvas rápidas a alta velocidad, se nota que es un coche con un centro de gravedad algo alto, típico de los eléctricos. En general, es un coche muy fácil de conducir y agradable para el día a día.
Unas palabras sobre la regeneración… El ID.THREE cuenta con un sistema de recuperación de energía bastante eficiente. Puedes ajustar la intensidad de la regeneración a través de diferentes modos de conducción, lo que te permite recuperar energía al frenar o levantar el pie del acelerador. Esto no solo ayuda a aumentar la autonomía, sino que también hace que la conducción sea más eficiente y, en cierto modo, más divertida. Con la práctica, te acostumbras a usar la regeneración para controlar la velocidad y reducir la necesidad de usar los frenos tradicionales. Es una característica que, una vez que la pruebas, te das cuenta de lo útil que es.
El chasis del ID.THREE es una plataforma modular específica para vehículos eléctricos, lo que permite una distribución óptima del peso y un espacio interior maximizado. Esto se traduce en una conducción estable y un habitáculo amplio y espacioso, especialmente en las plazas traseras. La construcción del chasis también contribuye a la rigidez del vehículo, lo que se nota en la estabilidad a altas velocidades y en la reducción de ruidos y vibraciones. Es una plataforma que ha sido diseñada específicamente para los coches eléctricos, y se nota en la calidad de la conducción.
Y finalmente, el precio… El precio del ID.THREE varía según la versión y el equipamiento, pero podemos hablar de un rango de precios que empieza en aproximadamente VEINTICINCO MIL euros y puede llegar a TREINTA Y CINCO MIL euros o más, dependiendo de las opciones que elijas. Es un precio competitivo dentro del segmento de los coches eléctricos compactos, aunque hay que tener en cuenta que el precio de los coches eléctricos en general sigue siendo superior al de los coches de combustión interna con características similares. Pero hay que considerar las ventajas a largo plazo, como el menor coste de mantenimiento y el ahorro en combustible.

















